martes, 19 de noviembre de 2019

Olas del feminismo en la historia


Desde la cuarta ola

¿Cuáles son las cuatro olas del feminismo en la historia?

Acceso a la educación, derecho al sufragio y equidad son parte de las luchas que la mujer debió librar a lo largo de la historia. Un repaso por la historia del tradicional patriarcado que, tarde o temprano, se va a caer.

3/12/2018
Clarín.com

De un tiempo a esta parte se oye hablar de la “Cuarta ola Feminista”, en el marco de las alarmantes cifras de la violencia de género, la brecha salarial, el famoso techo de cristal y el Paro Internacional de Mujeres que tuvo lugar el último 8 de marzo.

¿Cuáles son los anteriores movimientos que sentaron las bases de lo que estamos viviendo ahora?

La “Primera Ola Feminista” surgió a mediados del siglo XVIII, en torno a la polémica sobre la naturaleza de la mujer y la jerarquía de sexos. Estas pensadoras indagaron acerca de la educación y los derechos de la mujer. Cuestionaron los privilegios masculinos afirmando que no son una cuestión biológica y/o natural. Las autoras de referencia son: Poullain de Barre, Olympe de Gouges y Mary Wollstonecraft, esta última autora del famoso texto Vindicación de los derechos de la mujer (1792), un punto de partida fundamental para cambiar el pensamiento de la época.




La “Segunda Ola Feminista” se dio desde mediados del siglo XIX hasta la década de los cincuenta del siglo XX. Aborda entre sus puntos principales el derecho al voto femenino. Es aquí cuando el debate alrededor del sufragio universal se intensifica (la película Las sufragistas, del año 2015, retrata este momento en Ingaterra). Además, las mujeres reclaman el acceso a la educación superior, critican la obligatoriedad del matrimonio y comienzan a liberarse en su aspecto físico.

La “Tercera Ola Feminista” llegó en la década del sesenta y hay distintas opiniones respecto a su finalización. Mientras que algunos sostienen que sigue vigente, otros afirman que finalizó en los años ochenta. Va de las políticas públicas que reivindican a la mujer hasta el fin del patriarcado. En este movimiento fueron fundamentales los anticonceptivos porque le otorgaron el poder del control de la natalidad (y la liberación del goce sexual, no atado a la reproducción) y el divorcio se hizo ley en muchos países. Caen las vendas del "amor para toda la vida" y aparecen otras opciones para mujeres rebeldes. Las mujeres son candidatas reales en el mundo político, aunque su porcentaje es sensiblemente inferior al de los hombres.

La “Cuarta Ola Feminista” es la que vivimos en la actualidad y donde el activismo presencial y online cobraron gran protagonismo. Plantea el fin de los privilegios de género establecidos históricamente hacia el hombre. Asimismo, repudia la violencia de género establecida en todos los ámbitos de la vida. “Lo personal es político”, suele leerse de un tiempo a esta parte en las manifestaciones feministas. La sororidad, concepto que habla de la solidaridad entre mujeres, es central. En cuestión de derechos, la lucha por el derecho a la interrupción legal del embarazo aparece aquí como otro punto clave. También aparece con mucha fuerza el discurso anti estereotipos: nace el feminismo descolonial (contra el predominio de la raza blanca como modelo de éxito social), el feminismo gordo (contra la delgadez impuesta por el mundo de la moda) y hay una mayor unión con el movimiento LGTB, queer y de liberación sexual. Un eje ineludible fue el primer paro internacional de mujeres, de altísimo acatamiento, llevado a cabo el 8 de marzo de 2018, inmortalizado como #8M.




viernes, 15 de noviembre de 2019

Venezuela y la revolución bolivariana





La crisis del 2002

La economía en recesión desde fines del año 1998, la devaluación de la moneda brasileña el 13 de enero de 1999 y el “default” argentino de diciembre de 2001, terminaron por empujar al Uruguay hacia una de las crisis económicas más importantes de su historia.

En los primeros meses del 2002, el sistema bancario uruguayo ya había perdido el 40% de sus depósitos y reservas. En enero cayó el primero de los bancos de la plaza financiera uruguaya, que paradojalmente solo captaba depósitos “off shore”, principalmente de argentinos. El Banco Central intervino el Banco Galicia. En febrero, fueron denunciadas una serie de acciones fraudulentas en el Banco Comercial. Los hermanos Carlos y José Rohm habían desviado 250 millones de dólares. El Estado uruguayo y los accionistas internacionales debieron capitalizar al banco con 133 millones de dólares. 

La inestabilidad y desconfianza en el sistema financiero uruguayo se hizo más evidente y la fuga de depósitos crecía día a día. La situación se hizo insostenible. Finalmente, el 20 de junio el gobierno decretó la libre flotación del dólar. Un día después el Banco Central ordenó la intervención del Banco Montevideo- Caja Obrera, propiedad del grupo Peirano. El martes 23 de julio, el ministro de Economía Alberto Bensión renunció a su cargo y fue sucedido por el senador Alejandro Atchugarry. También cambiaron las autoridades del Banco Central, donde asumió la presidencia el economista Julio de Brun. 

El martes 30 de julio, el dólar se disparó de 27 a 35 pesos. El gobierno suspendió las actividades de los bancos Montevideo y Caja Obrera y decretó el feriado bancario por una semana. Mientras tanto, con el espejo de la situación argentina, se registraron algunos saqueos aislados en Montevideo. El ministro del Interior Guillermo Stirling, denunció que había grupos organizados detrás del los incidentes. Además, algunos ahorristas de los bancos intervenidos organizaron caceroleos. 


Durante la semana del feriado bancario, el país se jugó la salida de la crisis en suelo estadounidense. El gobierno envió a una delegación para negociar con el Fondo Monetario Internacional (FMI) un salvataje. Entre tanto, en Uruguay el Parlamento discutía la ley de reprogramación de vencimiento de depósitos de bancos oficiales y la creación del Fondo de Estabilidad del Sistema Financiero que finalmente aprobó. Se reprogramó la devolución de los depósitos a plazo fijo de los Bancos República y Banco Hipotecario a tres años. Fue un corralito a la uruguaya. Finalmente, el 4 de agosto se acordó con el FMI y el gobierno de Estados Unidos envió un adelanto de 1.500 millones de dólares. 

El lunes 5 de agosto reabrieron todos los bancos menos cuatro: El Banco Comercial, el Banco Montevideo-Caja Obrera, el Banco de Crédito y la Cooperativa Caycu fueron suspendidos y el gobierno comenzó un plan para su liquidación y venta. El martes 6 de agosto llegó a Montevideo el secretario del Tesoro de los Estados Unidos, Paul O´Neill, para así demostrar el apoyo de su país. El presidente Jorge Batlle lanza la famosa frase “We are fantastic”. 

El 2002 terminó con los uruguayos inmersos en una de las peores crisis económicas de la historia. 
A fines de ese año, el desempleo trepaba casi el 20% y la caída del poder adquisitivo alcanzaba el 19.5%. 58.000 uruguayos habían abandonado el país.


Antonio Ladra | 20/09/2008
http://m.elacontecer.com.uy/954-la-crisis-del-2002-noticia-2008-09-20.html

Cuestionario:

1) Buscar definiciones para: recesión, devaluación, default, corrida bancaria, libre flotación
2) ¿Qué sucedió con el sistema bancario? ¿Quiénes salieron perjudicados?
3) ¿Qué sucedió con el valor del dólar? ¿Quiénes se beneficiarán y perjudicarán ante esa situación?
4) ¿Qué pasos se tomaron para resolver la crisis bancaria?
5) ¿Qué consecuencias dejó la crisis bancaria a nivel económico?

jueves, 14 de noviembre de 2019

Atentados a las Torres Gemelas: 5 consecuencias














18 años de los atentados a las Torres Gemelas: 5 consecuencias posteriores

Marco Herrera
11.09.2019
65ymas.com

Las repercusiones de este atentado fueron mucho más allá de las políticas, bélicas y diplomáticas


Nadie ha olvidado la sobremesa del 11 de septiembre de 2001. Cuando todos nos disponíamos a almorzar o estábamos ya en el postre, los informativos abrían con lo que parecía ser un accidente en Nueva York, en el que un avión había chocado contra una de la Torres Gemelas. Pero tan solo unos minutos más tarde y con todos los noticiarios en directo, un segundo avión impactaba contra la otra torre y lo que en un principio se creyó un accidente giró rápidamente hacia un acto terrorista en pleno corazón del país más poderoso del mundo.

Al desastre en vidas humanas, más de 3.000 muertos, se unió un clima de hostilidad entre algunas naciones que eran señaladas por el entonces Presidente americano George W. Bush como cómplices o directamente patrocinadores del atentado. Pero sus repercusiones fueron mucho más allá de las políticas, bélicas y diplomáticas, ya que al haber empezado todo con pasajeros infiltrados en vuelos comerciales, la propia población sufriría las secuelas de aquel horror en forma de exhaustivos controles de seguridad ante la desconfianza de los estados en que se volviera a repetir otra masacre parecida. Repasamos cinco de las consecuencias de aquel desastre.

Bomberos en la Zona Cero del World Trade Center de Nueva York el 11 de septiembre de 2001



















Seguridad mucho más estricta en los aeropuertos

Antes del 11 de septiembre de 2011, no existían tan largas colas en los aeropuertos ni controles de seguridad tan exhaustivos. Se creó la Administración de Seguridad del Transporte y las estrictas medidas de seguridad no han disminuido en los 18 años que han pasado desde que se concibió. Las puertas de cabina en los aviones ahora también están protegidas para mantener a los pilotos seguros, y el proceso de inspección ha aumentado en escrutinio y tamaño.

La nueva tecnología ha evolucionado para hacer que sea aún más fácil para los funcionarios de seguridad de los aeropuertos encontrar materiales restringidos y los métodos de detección avanzados y las verificaciones de antecedentes han acelerado los viajes. En general, los vuelos se han vuelto más seguros como resultado de los ataques. Pero también ha habido quienes se han preocupado de que la mayor seguridad discrimine a determinadas razas y credos.


Control de seguridad en el Aeropuerto de Seattle (EE.UU.)















Fue creado el Departamento de Seguridad Nacional

El Departamento de Seguridad Nacional (en la serie Homeland puede verse bien cómo funciona) se creó 11 días después de los ataques del 11 de septiembre de 2001. Es una oficina organizada por funcionarios designados que supervisa la estrategia nacional y la seguridad nacional. Fue creado para proteger al país contra otro ataque terrorista a gran escala mediante el uso de la recopilación de información y las investigaciones dirigidas por el departamento.

Este departamento es responsable de las tareas antiterroristas, así como de la seguridad nacional y la prevención de desastres. Ha crecido exponencialmente desde su creación, convirtiéndose en el tercer departamento de gabinete federal más grande.


Tropas estadounidenses en Afganistán

Uno de los efectos más persistentes de los ataques del 11 de septiembre ha sido la guerra en curso en Afganistán. Poco después de los ataques, Estados Unidos bajo el Presidente George W. Bush comenzó a bombardear Afganistán debido a que el Gobierno dirigido por los talibanes se negó a entregar al presunto líder terrorista Osama Bin Laden.

Para noviembre, varios países, incluidos los Estados Unidos y el Reino Unido, habían formado la Alianza del Norte y habían tomado el control de la capital, Kabul. Pero casi dos décadas después, los americanos todavía tienen tropas en el país que trabajan para ayudar al gobierno a reconstruirlo y estabilizarlo. El Presidente Trump anunció en 2017 que aumentaría el número de tropas en Afganistán en 3.000 soldados, elevando el número total a 14.000.

Han crecido las deportaciones

Después del 11 de septiembre, la administración Bush incrementó las deportaciones y aumentó las restricciones de inmigración en respuesta a los ataques. Según ABC News (@ABC), las deportaciones se han duplicado en la última década y de 2001 a 2012, hubo aproximadamente un aumento del 400% en deportaciones de criminales. Es importante tener en cuenta que si bien la mayoría de las personas deportadas fueron acusadas de un delito, no necesariamente fueron condenadas por ello.

Añadió nuevos términos a nuestro vocabulario

Antes del 11 de septiembre, probablemente nunca escuchaste nada sobre una "Guerra contra el Terror", pero en los días, semanas y meses posteriores a los ataques, esa frase se hizo común, junto con algunas otras. "Los Talibanes", "El eje del mal" o "Alerta terrorista" fueron términos que surgieron y se hicieron directamente populares a partir del 11 de septiembre.


https://www.65ymas.com/sociedad/internacional/18-anos-atentados-torres-gemelas-5-consecuencias-posteriores_7774_102.html



lunes, 11 de noviembre de 2019

Chernóbil y las reformas de Gorbachov


Evguenia Fediakova, historiadora: “El mayor error de Gorbachov fue ocultar la verdad de Chernóbil”

La académica y doctora en Ciencias Políticas analiza para Culto las implicancias del accidente en la planta nuclear para el proceso de reformas impulsado por el último gobernante de la URSS y, de paso, nos relata cómo vivió esos días en Moscú.

En abril de 1986, Evguenia Fediakova estudiaba Historia en la Universidad Lomonosov en Moscú. Pese a que circulaban noticias sobre el accidente de Chernóbil, por esos días ella se disponía a viajar a una zona cercana. “Con mi grupo de amigos nos estábamos preparando para salir en el verano para los trabajos voluntarios a Bielorrusia, justamente a la zona donde hizo mayor daño la catástrofe”, cuenta a Culto.

Sin embargo, la joven soviética se vio forzada a echar pie atrás en su intención, pese a que en los primeros días las informaciones oficiales transmitían cierto optimismo. “Todos decían que había sido un accidente y que no había nada de qué preocuparse”, recuerda la hoy doctora en Ciencias Políticas. “Pero nuestros padres nos prohibieron tajantemente salir, de hecho, nos salvaron la vida. Al final viajamos a otra parte”, agrega.

Los sucesos de Chernóbil ocurrieron poco tiempo después de que en el XXVII Congreso del PC Soviético se anunciaran las reformas que el entonces Secretario General, Mijaíl Gorbachov, pretendía implementar en la URSS a fin de impulsar su desarrollo económico y social. Como destaca Hobsbawm en su Historia del Siglo XX (2007, Crítica), el oriundo de Privólnoie había sido un fuerte crítico del estancamiento, pues de ser un país exportador de manufacturas, en los sesenta, pasó a depender del petróleo y el gas. Y los indicadores sociales, no eran mucho mejores.

“Era el momento de la Perestroika, cuando Gorbachov se comprometió a cumplir con los compromisos de Glasnost, de la libertad de palabra, de prensa”, detalla Fediakova. “Había mucha expectativa, mucha esperanza en la realización de la democratización, en la honestidad. Entonces esperábamos que, frente a esta noticia, la actitud del gobierno también sería coherente con sus promesas”.

-¿Y fue así?

-Lamentablemente no, porque pronto, muy pronto, nos dimos cuenta que lo que decía el gobierno no era cierto. La libertad de prensa ya existía, entonces como ya teníamos acceso a distintas fuentes de información, nos dimos cuenta muy rápidamente que no era un accidente limitado, sino que era una catástrofe de alcance al menos europeo, que la situación era realmente catastrófica, y lo que decía Gorbachov no correspondía a la realidad. Muy pronto su promesa de transparencia, la Glasnost, cayó en desgracia.

-¿Marcó Chernóbil un punto de inflexión en la credibilidad de Gorbachov?

-Yo creo que sí. Pienso que le afectó de una forma muy negativa el faltar a la verdad. Peleamos muchísimo por esta política de Glasnost, la libertad de palabra, la honestidad, pero nos dimos cuenta de que el gobierno seguía ocultando los hechos. El gran error del gobierno de Gorbachov fue ese, ocultar la verdad después del 26 de abril.

-¿Hay un vínculo entre Chernóbil y la crisis que llevó al fin de la URSS?

-Por supuesto, porque como ya no tenía la confianza ni la credibilidad la gente comenzó a desconfiar de lo que él decía y prometía. Además, para esas fechas Gorbachov ya estaba entre dos fuegos: el Partido Comunista más conservador, más tradicionalistas, estalinista, diría yo, y otro frente más izquierdista, más liberal, más europeo-occidental. Y bueno, la gente más joven, universitaria, colocó su confianza en este frente más de izquierda, que en términos occidentales era más derechista neoliberal. Para la URSS de aquel entonces era la gente más creíble. Entonces Gorbachov quedó atrás en su promesa de Perestroika, de democratización, porque este otro frente apareció como más confiable.


Tomado de: https://culto.latercera.com

Chernóbil y el hundimiento de la URSS

Chernóbil y el hundimiento de la URSS


El 26 de abril de 1986 el núcleo del grupo número 4 de la central nuclear Vladimir Ilich Lenin de Chernóbil, una pequeña localidad ucraniana a sólo 15 kilómetros de la frontera bielorrusa, se fundió provocando dos explosiones seguidas. Fueron de tal magnitud que volaron la tapa del reactor liberando de este modo una gran cantidad de material radioactivo a la atmósfera. Fue el accidente nuclear más grave de la historia aunque, en rigor, deberíamos decir que se trató de una catástrofe provocada por el hombre. Las autoridades de la ya extinta Unión Soviética estaban experimentando en aquellos momentos con la central y, cuando se produjo el accidente, empeoraron el desastre mediante decisiones arbitrarias cuando no contradictorias.
El coste humano, económico y ecológico fue inmenso. El reactor destruido expulsó dióxido de uranio, carburo de boro, óxido de europio y otros materiales altamente radioactivos en una cantidad tal que, cuando lo midieron, comprobaron que la emisión era 500 veces superior a la de la bomba atómica arrojada sobre Hiroshima en 1945. Murieron 31 personas como consecuencia directa del accidente y las víctimas indirectas a causa de las labores de liquidación se cifran en decenas de miles. A eso habría que añadir la declaración de una zona muerta de 2.600 kilómetros cuadrados en torno a la central, un área equivalente a la superficie de la provincia de Vizcaya (España). Todos sus habitantes, unos 115.000, fueron evacuados y reasentados en otras regiones de la URSS.
Para el país supuso un daño financiero muy importante pero difícil de cuantificar porque en la URSS no imperaba la economía de mercado y, por lo tanto, no se conocían los costes reales de factores tales como el trabajo o el capital. Es imposible, por ejemplo, saber cuánto costaron las brigadas de liquidadores o el hormigón con el que se levantó el primer sarcófago que cubrió el reactor accidentado. Las estadísticas en la Unión Soviética no eran fiables, dependían de los mandos políticos y en muchos casos se las inventaban sin rubor con meros fines propagandísticos.
La tasa Chernóbil
Sucedió además que, en los cinco años que transcurrieron desde el desastre hasta la independencia de Ucrania en agosto de 1991, el de Chernóbil fue el menor de los problemas al que tuvieron que atender los líderes soviéticos. El desastre nuclear sirvió de pistoletazo simbólico a una crisis terminal que culminó con la desaparición de la URSS pero no fue el causante de la misma. Durante ese tiempo se limitaron a vaciar la zona de exclusión y abandonarla a su suerte. A los afectados se les reubicó y fueron indemnizados, pero en rublos, que era una moneda que no servía para nada fuera de la Unión Soviética. Dentro tampoco para mucho, tan sólo para adquirir productos en las tiendas estatales de abastos después de esperar una larga cola.
Había, cierto es, una tasa de cambio oficial con el dólar, pero era algo sin aplicación en el mundo real. Cualquiera que en los años 80 acudiese a un banco de Madrid o París con rublos para cambiarlos por la moneda local no se los aceptaban. Los soviéticos tenían estrictamente prohibida la tenencia de divisa extranjera, por lo que pocos se arriesgaban a hacerse con dólares o marcos alemanes y menos aún a mostrarlos en público. El vecino envidioso podía denunciar y eso era sinónimo de problemas y seguramente también de cárcel. Tan pronto como los soviéticos pudieron poseer divisas el rublo se desplomó mostrando al mundo su valor real, que se aproximaba a cero.
Con unos cálculos hechos en una moneda que era poco menos que del Monopoly los costes del desastre de Chernóbil son muy difíciles de calcular durante los primeros cinco años. Habría que esperar a la era postsoviética para hacerse una idea. Ucrania y Bielorrusia crearon la llamada tasa Chernóbil para afrontar las indemnizaciones a los supervivientes y el coste de tener áreas enteras del país afectadas por la radiación.
Un colapso anunciado
Los que sí ayudaron a partir del 91 fueron los países de Europa occidental. Este fue el caso del nuevo sarcófago, que terminó de instalarse en 2016 y que costó 2.100 millones de euros pagados por un grupo de países europeos a través del Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo, una entidad creada en 1991 precisamente para ayudar a los países del este a salir de las economías planificadas.
Estamos por lo tanto, ante una cuestión doble. ¿Tuvo influencia el desastre de Chernóbil en la desaparición de la Unión Soviética?, y si la tuvo, ¿cuán determinante fue?
Tenerla la tuvo, pero no fue capital. La Unión Soviética hubiese colapsado con o sin la tragedia de Chernóbil porque los factores políticos y económicos que la condenaron ya estaban ahí antes del accidente. El factor político fue Mijail Gorbachov y su Perestroika [reestructuración]. Gorbachov creía de buena fe que aquello se podía reconducir, pero no, el sistema no admitía reformas. La Perestroika llevaba aparejada la Glasnost [transparencia]. Tan pronto como se pudo hablar libremente el partido perdió el monopolio de la información y del relato. Arreciaron las críticas sobre el sistema y el aparato político que lo mantenía, y todo se vino abajo.
Desde el punto de vista económico la soviética era una economía improductiva. Las divisas entraban por la venta de petróleo, gas y otros minerales en el extranjero, pero su precio cayó a plomo en los 80. El crudo concretamente pasó de los 100 dólares/barril en 1979 a unos 25 mediada la década. El país estaba lleno de gente que no producía nada pero comía a diario, simplemente no alcanzaba para todos y, como consecuencia, aparecieron el racionamiento y las colas.
Y los gastos al alza
Para colmo de males, los gastos de estructura del Estado no hacían más que aumentar. La guerra en Afganistán costó una fortuna. Había, además, que mantener el ritmo a los estadounidenses en la tierra, el mar, el aire y el espacio. El desarrollo de armas modernas requiere de una cuantiosa inversión previa que Moscú no se podía permitir. En el momento en el que se liberó la información las puertas y ventanas se abrieron mostrando al mundo un edificio gigantesco pero lleno de termitas en el que nadie salvo los caseros quería vivir.
En su momento lo de Chernóbil tuvo mayor impacto en términos de imagen que económicos. Demostraba con hechos inapelables que aquello era un completo caos, que los dueños del segundo arsenal atómico del mundo no sabían ni como administrar su propia red de centrales nucleares. Era de una gravedad tal que no hubo propaganda que lo consiguiese blanquear. Ni dentro del país ni, por descontado, fuera.
En 1988, cuando comenzaron las protestas en las repúblicas bálticas, el movimiento se extendió como la pólvora. Ese mismo año los ucranianos y los georgianos salieron también a la calle reclamando la independencia. Entre 1989 y 1990 vendrían todas las demás repúblicas que se independizarían una tras otra a lo largo de 1991. En Ucrania, zona cero de la catástrofe, se convocó un referéndum de independencia en el que votó a favor el 92% de la población. Nadie, a excepción de los miembros del partido y su clientela, creía en la URSS. Los ucranianos tenían presente Chernóbil, pero mucho más la dictadura y sus miserias que querían dejar atrás cuanto antes.

lunes, 7 de octubre de 2019

Desaparición forzada, el caso de Elena Quinteros

Desaparición forzada

"La privación de la libertad de una o más personas, cualquiera que fuere su forma, cometida por agentes del Estado o por personas o grupos de personas que actúen con la autorización, el apoyo o el consentimiento del Estado, seguida de la falta de información o de la negativa de reconocer dicha privación de libertad o de informar sobre el paradero de la persona, con lo cual se impide el ejercicio de los recursos legales y de las garantías procesales pertinentes".


Convención Interamericana sobre Desaparición Forzada de Personas, artículo 2 en la Ley 16.724.


El caso de la maestra Elena Quinteros

Elena Quinteros era mili­tante del Partido por la Victoria del Pueblo y se encontraba requerida por las Fuerzas Conjuntas. Fue detenida el 26 de junio de 1976 y entregada al Batallón de infantería N° 13, donde fue torturada. Planeó su fuga y logró convencer a sus captores de que los conduciría hasta un contacto, en una esquina de la ciudad. El 28 de junio, alrededor de los 10 de la maña­na, llegaron al lugar. Elena se dirigió a encontrarse con su falso contacto y comenzó o correr hasta alcanzar el predio de la Embajada de Venezuela, mientras gritaba su nombre y profesión, los funcionarios policiales lograron alcanzarla e invadieron la sede diplomática para arrebatarla de allí y conducirlo nuevamente al vehículo policial. La Embajada solicitó la entre­ga de la mujer que había sido secuestrada de suelo venezolano. Un memorándum secreto del Ministerio de Relaciones Exteriores, datado en julio de 1976, presento las ventajas y desventajas de entregar a Elena Quinteros al gobierno venezolano.

"Entregar a lo mujer: Tendrá las siguientes ventajas: 1) Evitar el rom­pimiento de relaciones diplomáticos con Venezuela y todos las consecuen­cias y problemas conexos. 2) Radicaría nuestra posición de cumplidores fieles de nuestros compromisos internacionales. 3) Constituiría una posición explotable internacionalmente a nuestro favor.
Desventajas: 1) Apareceríamos haciendo lo entrega bajo presión de Venezuela. 2) Reconoceríamos la comisión de un acto ilícito y tendría que afirmarse sanción o los responsables. 3) Lo mujer podría hacer decla­raciones en nuestro contra. 4) Los elementos anteriores podrán ser explo­tados contra nosotros…”

Elena Quinteros no fue entregada y Venezuela rompió relaciones diplomá­ticas con Uruguay. Según el informe final de la Comisión para la Paz, creada por el presidente Jorge Batlle, Elena fue ejecutado en los primeros días de noviembre de 1976. En el año 2002, 26 años después del secuestro, los investigaciones realizadas en cumplimiento del artículo 4° de la ley de Caducidad llevaron a lo cárcel al canciller de la época quien fue considerado el principal responsable de los hechos.


Citado en Alvaro Rico, Investigación histórica de detenidos desaparecidos. Presidencia de lo Repúblico, IMPO, 2007, tomo i, fichas personales.

sábado, 5 de octubre de 2019

¿Por qué se produjo un Golpe de Estado en Uruguay en 1973?

La situación internacional y su incidencia en el Golpe de Estado uruguayo
No se puede entender por qué se produjo un Golpe de Estado en Uruguay sin conocer lo que sucedía en el mundo en ese momento. Hay dos factores claves en el plano internacional que incidieron fuertemente en nuestra Dictadura.
  • La Guerra Fría estaba instaurada desde el final de la Segunda Guerra Mundial. Las dos grandes potencias se disputaban el mundo tras la caída de Hitler y operaban en todos los rincones del planeta. Por un lado Estados Unidos pretendía extender el sistema capitalista y frenar el avance del socialismo. Por su parte la Unión Soviética tenía como objetivo expandir el socialismo y detener al sistema capitalista. La CIA y la KGB operaban en todo el mundo, inclusive en Uruguay. La CIA norteamericana apoyó el Golpe de Estado en Uruguay y en toda la región. Cuando Pinochet da el Golpe de Estado en Chile, aviones norteamericanos surcaron los cielos en pleno ataque al presidente Allende, electo por voto popular. También, y en caso que ganara el Frente Amplio las elecciones del 71, Estados Unidos solicitó a Brasil que nos invadiera, cosa que el país norteño aceptó. Por su parte la KGB financiaba y entrenaba movimientos de Izquierda en toda América Latina.

  • La Revolución Cubana también fue un factor clave. Provocó un efecto contagio en todo el continente. Un isla frente al gran imperio norteamericano había salido triunfante con una revolución liderada por Fidel Castro y el Che Guevara, destronando al dictador Batista. Muchos jóvenes uruguayos vieron en esa revolución un gran faro a seguir. De hecho el reclutamiento del MLN explotó en ese momento de la Historia. Sin embargo cuando el Che se hizo presente en la Universidad de la República, brindó un mensaje que no esperaban muchos de nuestros jóvenes: el Uruguay debe llegar al socialismo por la vía democrática y no por las armas. Por supuesto que esa recomendación de Guevara no fue seguida por los integrantes del MLN.
¿Cuáles fueron los principales factores internos que llevaron a una Dictadura cívico-militar en Uruguay?
Por supuesto que existen diversos factores internos para comprender a la Dictadura, pero nosotros pretendemos centrarnos en los que consideramos los más relevantes para explicar por qué se produjo un Golpe de Estado en Uruguay.
  • La crisis económica. Una vez finalizada la Guerra de Corea en 1953, comenzamos a gastar las reservas que nos quedaban de nuestro auge económico. Pero a partir de 1955 la Suiza de América, el Uruguay de las Vacas Gordas, comprendió que el precipicio estaba a pocos pasos y era inevitable. Esta crisis económica de largo aliento impactó fundamentalmente en una clase media que veía cómo sus privilegios se esfumaban. Doctores por ejemplo trabajando de mozos o de taxistas. Esta crisis económica, fue un caldo de cultivo para el surgimiento de movimientos de izquierda que veían en el socialismo un camino a seguir. Pero también la crisis económica no fue positiva para los sectores empresariales, que buscaban mantener sus ingresos a costa de bajos salarios y poca inversión. Estos sectores empresariales son los que van a exigirle al gobierno «mano dura» para frenar al movimiento de los trabajadores (de hecho en la década del 60 se crea la CNT como espacio para reclamar mejores condiciones de trabajo).

  • Conflictividad social. La crisis económica derivó en conflictos sociales. También aumentó la cantidad de uruguayos que buscaron otros horizontes en el exterior. La emigración por causas económicas se hizo constante. Miles de uruguayos se fueron del país. Pero también aumentó el nivel de conflicto social ante una torta económica que cada vez era más pequeña para repartir. Huelgas, reclamos salariales, movilizaciones, provocaron una situación límite en nuestro país.

  • Falta de respuesta efectiva de la clase política. Los partidos políticos uruguayos no lograron hallar soluciones claras a la crisis económica. Una de las alternativas que tomaron fue la decisión de pedir nuestro primer préstamo al FMI, lo que llevó a incrementar nuestra deuda externa e incluso a provocar mayor tensión social. La clase política uruguaya de ese entonces tiene gran responsabilidad en el Golpe de Estado por no hallar respuestas equilibradas a tiempo a una situación de escalada de violencia social. Tras la muerte de Gestido, por ejemplo, Pacheco Areco procuró defender los intereses de los sectores empresariales en detrimento de los trabajadores, agudizando el conflicto social y aumentando el poder militar.

  • Radicalización de los movimientos de izquierda. El surgimiento del MLN-T fue clave para entender el proceso de Dictadura. Es cierto que fueron derrotados antes del Golpe de Estado. ¿Pero acaso su amenaza no seguía latente? Los Tupamaros operaron en nuestro país con el fin de llevar a cabo una revolución armada de tinte socialista, diseñando un movimiento guerrillero urbano inédito en el mundo. Sin dudas que el MLN surge como una respuesta a la crisis económica en el marco de la Guerra Fría, en un mundo cada vez más bipolar. Su presencia fue clave para que la Derecha cobrara mayor protagonismo en el gobierno.

  • Derechización de los mandos militares y del gobierno. En la medida que la crisis económica se consolidaba y la conflictividad social aumentaba, los mandos militares comenzaron a derechizarse, a tomar un camino donde se aceptaba la idea de reprimir a sangre al movimiento sindical que reclamaba por sus derechos. El ala izquierda militar fue perdiendo peso. De hecho el General Seregni intenta transitar caminos de conciliación que lo apartan del mando militar. Por su parte los militares hallan en Pacheco Areco un aliado incomensurable, aceptando incluso la terrible idea de la creación de un Escuadrón de la Muerte que operaba en las tinieblas legales y donde se aplicaba la tortura desarrollada por los franceses en la guerra de Argelia y enseñada por los norteamericanos en la Escuela de Panamá. En el marco de la Guerra Fría, los militares uruguayos y el gobierno de Pacheco Areco, contaron con el apoyo de Estados Unidos para operar en su lucha contra los «insurgentes».

  • Gran parte del pueblo uruguayo «balconeó». Ante la radicalización de los sectores de izquierda y la derechización de los mandos militares, cuando Bordaberry disolvió las cámaras el 27 de junio de 1973, la gran mayoría de los uruguayos no hizo nada. Miró la situación desde un balcón. Es cierto que los movimientos sindical y estudiantil salieron a las calles para frenar el Golpe, pero la mayoría de los uruguayos permanecieron en sus casas y no atinaron siquiera a protestar. Esto sin dudas generó un apoyo pasivo a las Fuerzas Armadas que vieron su oportunidad de tomar el control de un gobierno que no hallaba soluciones políticas a la compleja situación del país. El Golpe de Estado llegó para quedarse por muchos años en nuestro país en un período oscuro que vivimos y aceptamos gran parte de los uruguayos.
Publicado en CiudadMalvín.com
BY  · JUNIO 27, 2017
https://ciudadmalvin.com/por-que-se-produjo-un-golpe-de-estado-en-uruguay/

viernes, 4 de octubre de 2019

El golpe de Estado y la instauración de la dictadura


El 27 de junio de 1973, el presidente Juan María Bordaberry decretó la disolución del Parlamento instaurando una dictadura, en el marco de una escalada golpista en otros países del Cono Sur de América Latina. En el caso uruguayo era la tercera vez que, en el siglo XX, un presidente electo constitucionalmente daba un golpe institucional, aunque eral la primera vez que lo hacía con la participación protagónica de las Fuerzas Armadas.

No fue un acontecimiento repentino e inesperado, sino que se trató del desenlace de un largo proceso de deterioro del sistema político democrático, claramente reconocible a partir de 1968, pero cuyas raíces más profundas deben ubicarse, en el contexto de la Guerra Fría, en la crisis económica surgida a mediados de la década de 1950 y la conflictividad social derivada de esta situación.

En Uruguay, la disposición reiterada de “medidas prontas de seguridad” (un instrumento constitucional previsto para casos de excepción) a partir de 1968, permitió la suspensión de las garantías individuales, la limitación de la libertad de expresión y de prensa, la prohibición del derecho de huelga y la restricción de las actividades sindicales. Asimismo, se decretó la “militarización” de funcionarios de los sectores público y privado que se hallaban en conflicto, se allanaron reiteradamente los locales universitarios y se incrementó el uso de la fuerza en la represión de la protesta social. A pesar del rechazo multitudinario a la muerte del estudiante Líber Arce, la escalada represiva fue en aumento.

El abuso de ciertos instrumentos legales, el desborde represivo y la adjudicación de nuevas funciones a las Fuerzas Armadas fueron estrategias empleadas desde los últimos años de la década de 1960 para contener la alta movilización política y gremial y reprimir los focos de guerrilla urbana Ello explica que en el momento del golpe ya se hubiesen producido detenciones, censuras y prohibiciones, además de haberse comprobado que la aplicación de torturas a detenidos era una práctica habitual.

La alianza de militares y civiles que gobernó desde la disolución del Parlamento, en sintonía con las orientaciones de la llamada Doctrina de Seguridad Nacional y del neoliberalismo e económico buscó promover transformaciones profundas en la política, la economía y las  sociedad uruguaya. Entre sus primeras medidas el nuevo régimen suspendió la actividad de los partidos políticos y decretó la disolución de la Convención Nacional de Trabajadores (CNT), disponiendo la clausura de todos sus locales y el arresto de sus dirigentes. Por decreto se suprimió el derecho a la huelga de los trabajadores. Para finales de 1973, se había intervenido la Universidad e ilegalizado casi la totalidad de las agrupaciones políticas y estudiantiles de izquierda. A su vez, el control que el régimen tenía sobre la información que circulaba públicamente, ejercido a través de la censura y la clausura de muchos medios de comunicación, dificultaba en gran medida la difusión pública de esta situación.

El año se cerró con la instalación de un Consejo de Estado, órgano consultivo, presidido por Martín Echegoyen e integrado por otros civiles, cuyas sesiones no fueron públicas.

Tomado de la web del Centro Cultural Museo de la Memoria.


viernes, 27 de septiembre de 2019

Uruguayas en la Unión Soviética durante los años 1970s


EL PAÍS  QUÉ PASA

CIEN AÑOS: LA REVOLUCIÓN RUSA

Uruguayas en el Moscú de los 70

La familia Saxlund se radicó en 1972 en la capital soviética y algunos de sus integrantes vivieron allí hasta entrados los 90. Las hermanas Marta y Raquel recuerdan cómo era la vida bajo el régimen comunista: desde la música pop a una TV sin publicidad. Sus historias en el día a día.

Lunes, 23 Octubre 2017

Ricardo Saxlund fue un periodista uruguayo corresponsal en Moscú del diario de extracción comunista El Popular. En 1972, en medio de la persecución previa a la dictadura, llegó a la capital soviética con su esposa y sus 11 hijos, entre ellos Marta y Raquel Saxlund, quienes a su llegada a la URSS tenían 13 y 11 años.

Vivían en un apartamento cerca de la emblemática Plaza Roja. Aprendieron el idioma e hicieron la secundaria y la universidad en aquel país. Marta se recibió de periodista y volvió a Uruguay en 1984. Raquel se casó, tuvo dos hijos y permaneció hasta 1991. Ambas guardan buenos recuerdos de aquellos tiempos juveniles, mantienen amistades y han vuelto varias veces. Es más, Raquel planea otra visita en ocasión del Mundial de 2018.

Casas.

El Estado otorgaba vivienda a las familias, por lo general en apartamentos dentro de grandes complejos. Las puertas no daban a la calle, si no a un patio interior, que era el centro de la vida social de los vecinos. Había juegos infantiles y en invierno se formaban pistas de patinaje. A través de grandes arcos se daban las salidas a la calles exteriores.

Podía darse el confinamiento. Marta recuerda casos de apartamentos compartidos por varias familias. Se dividían las habitaciones y compartían la cocina, que podía tener dos o tres heladeras.

Bebidas.

El refresco gaseoso más popular era la Puratina, una especie de guaraná. Había una bebida cola con la marca Bailkal y existía un refresco de centeno fermentado, una especie de malta pero más fuerte. Rondando los 80, con mayor apertura en el régimen, aparecieron las primeras gaseosas de origen occidental: Fanta y Pepsi. Coca Cola por entonces no.

La tradición en helados era más básica que la uruguaya. "Todos eran de crema doble, como si fuera chantilly congelado, y a eso se le agregaban diferentes salsas o frutos", recuerda Marta.

Compras.

"Era muy común que lo que fueras a buscar al supermercado no estuviese. Entonces traías otra cosa y buscabas cambiarla por lo que necesitabas", asegura Raquel y ejemplifica: "Yo iba a buscar papel higiénico, pero como no encontraba, traía pasta de dientes. Y empezaba a hablar con los vecinos a ver quién me lo cambiaba por el papel".

Marta también recuerda las colas en los comercios. "No faltaba dinero, sino productos". La vestimenta tampoco tenía mucha variedad. Era frecuente que las tiendas vendieran las mismas prendas y las rusas de una región terminaran vestidas prácticamente iguales.

Educación.

Exclusivamente pública, los niños y adolescentes hacían primaria y secundaria en los mismos edificios. El liceo iba hasta "décimo", pero empezaba en lo que sería el cuarto de escuela uruguayo por lo que terminaba a los 16 o 17 años. El horario era de 8:00 a 14:00 horas.

Los docentes eran multifuncionales. "La directora daba las clases de literatura o de matemáticas y era también la administrativa", recuerda Marta. El énfasis en la disciplina no le pareció excepcional. "Igual que en Uruguay, te podían mandar a la dirección".

Los estudiantes universitarios con mejores niveles recibían un premio mensual de 60 rublos si eran rusos y de 90 para los extranjeros. Un almuerzo en comedores estudiantiles podía costar 1 o 1,5 rublos, por lo que a veces les daba para ahorrar.

Pioneros.

Los niños y adolescentes solían sumarse al Movimiento Pioneros, que era como los Scout, pero de raigambre comunista. Recibían el pañuelo rojo distintivo en ceremonias similares al juramento de la bandera y prometían seguir el ideario de Lenin y del Partido. Raquel Saxlund recuerda que recibió el pañuelo de la madre del cosmonauta Yuri Gagarin.

En verano se organizaban los campamentos de pioneros. Los adolescentes se iban ¡por 40 días! a instalaciones en las afueras de la ciudad. Había competencias de nado y otros deportes, además de otras actividades de trabajo en oficios de campo, juegos y entretenimiento.

Salud.

Gratuita y obligatoria, como la enseñanza. El Estado no solo daba acceso, sino que imponía a los ciudadanos chequeos médicos cada seis meses.

Marta cuenta que sufrió un episodio de rara alteración que implicaba que los niveles máximos y mínimos de su presión prácticamente no tuvieran diferencia. Fue estudiada y atendida por varios especialistas hasta que le dieron medicación específica para el mal y lo superó.

Unos 30 años después, en Uruguay, hizo la misma crisis y aquí le han dicho que no hay tratamiento para su condición. "Nuestros servicios de salud son lamentables", compara.

Televisión.

A las 21:00 era la hora del informativo, llamado Tiempo. Comenzaba con un boletín informativo del Comité Central del Partido Comunista y luego se daban noticias internacionales y el pronóstico del clima. Duraba media hora.

Otros contenidos de los canales de TV era series de ficción, como 17 instantes de la primavera, muy recordada por Marta. No existía la publicidad.

El programa Encuentro con los niños se emitía antes del informativo. Era conducido por una señora que aparecía en pantalla con un muñeco de conejo y daba las buenas noches a los niños.

Transporte.

Tener un auto era un lujo en la URSS de los 70, reservado a los funcionarios con cargo medio o alto en el Partido Comunista. Las marcas eran Lada y Moskvich, en orden de prestigio.

La mayoría de las personas se movilizaba en el transporte público en trenes, subtes, ómnibus, trolebuses o taxis.

Raquel menciona otra modalidad. "El Uber de hoy era común en la Unión Soviética. Parabas a cualquier auto que pasaba y le preguntabas cuánto te cobraba por llevarte".

El pasatiempo durante los viajes era la lectura. "Así como hoy van todos con el celular, en la URSS se leía", recuerda Marta. Los libros eran baratos y a la cabeza de las preferencias estaba la poesía.

Esparcimiento.

La salida cultural preferida por los rusos hasta hoy es el teatro. Los concurrentes se visten de gala para asistir al Bolshói (Gran teatro).

En los cafés no se podía permanecer charlando porque había colas de espera. En un restaurante podía ocurrir lo contrario. "Te sentabas en una mesa y venía un funcionario a decirte que no había lugar. Nosotros ya cumplimos con el plan, ya atendimos las 10 mesas que nos tocaban, decía y no había caso", recuerda Raquel.
Por más que no había boliches nocturnos, los jóvenes solían hacer grandes fiestas cuando finalizaban el secundario en "décimo". Comenzaban en la misma escuela y luego hacían paseos por la ciudad.

A los 18 años, los varones iniciaban el servicio militar obligatorio, por lo que los amigos organizaban despedidas en casas. Ahí corría mucho el alcohol, o sea, el vodka. La tradición indicaba empinarla a temperatura natural. También tomaban cerveza.

Música.

La música pop soviética que sonaba en los años 70 les recuerda a las hermanas Saxlund a Márama o Rombai. "Cuando escuché por primera vez la cumbia cheta, me acordé enseguida de los acordes de aquellos años", dice Marta.

También había cantantes de música folclórica o patriótica. Los artistas extranjeros de mayor llegada eran Los Beatles, Rolling Stones, Raphael o Lolita Torres.

El final.

Raquel tenía dos grandes amigas en la URSS, ambas de nombre Tania. Una era vecina del complejo y la otra hija de un funcionario del partido. "Tenía acceso a todo lo que quisiera: ropa, gustos... Luego de la Perestroika, no soportó el cambio y se suicidó", relata.

La URSS cayó en 1991. Para ese entonces, casi todos los Saxlund se habían vuelto a Uruguay. Solo quedó Ricardo, el padre, un enamorado del país. Falleció en Moscú en 1995 y allí están sepultados sus restos. Para Marta, aquellos años fueron "muy felices". Raquel también los valora especialmente. "Lo que me dio la URSS no me lo hubiera dado nunca Uruguay".

"El cine no demonizaba a Estados Unidos".

Durante la Guerra Fría, gran parte de las películas de acción o bélicas de Hollywood se encargó de asociar a los soviéticos con el rol villano. Las uruguayas Marta y Raquel Saxlund no recuerdan el caso inverso. Ellas vivieron en la URSS entre 1972 y 1991. "De EE.UU. no se hablaba prácticamente". Las películas nacionalistas se afirmaban en el triunfo sobre el nazismo en la Segunda Guerra Mundial, que en la URSS así como en la Rusia de hoy se le llama Gran Guerra Patria. "Los malos habían sido los nazis, la ultraderecha".

Las tres grandes fechas patrias de la URSS eran el 1 de mayo por el Día de los Trabajadores, 9 de mayo, que se celebraba el triunfo sobre el nazismo, y el 7 de noviembre como aniversario de la Revolución de Octubre. En todos los casos había desfiles en la Plaza Roja, muchas veces con tanques, misiles y armamento militar muy pesado que al irse pasaba por la puerta de la casa de las uruguayas. "Las primeras veces nos asustábamos".

jueves, 26 de septiembre de 2019

Hitos y curiosidades de la Guerra Fría

Hitos y curiosidades de la Guerra Fría

Publicado: 2 feb 2014 09:20 GMT

https://actualidad.rt.com/actualidad/view/118744-hitos-curiosidades-guerra-fria-eeuu-urss

Los más de cuarenta años marcados por la tensión geopolítica, económica e ideológica entre la URSS y EE.UU. pasaron a la historia como la Guerra Fría (1946 - 1991), un periodo bien conocido y plagado de hechos e hitos históricos.

¿Quién inventó el término Guerra Fría?

El uso del término Guerra Fría se generalizó en el año 1945 para designar las tensiones geopolíticas entre la URSS y EE.UU. Por primera vez apareció el 19 de octubre de 1945 en un artículo de George Orwell titulado 'Tú y la bomba atómica' en el diario británico 'Tribune', donde sostenía que la aparición de las bombas atómicas llevarán a la aparición de dos o tres megapotencias que, de una parte, podrían matar a millones de personas y, de otra, comprometerse a no atacar nunca a otras megapotencias. A dicha situación Orwell la denominó "guerra fría". No obstante, fue el financiero estadounidense y consejero presidencial Bernard Baruch quien usó oficialmente el término por primera vez el 16 de abril de 1947 durante un discurso en la Camará de Representantes de Carolina del Sur cuando afirmó: "No nos engañemos: estamos inmersos en una Guerra fría". A popularizar el término también contribuyó el columnista Walter Lippmann con la edición en 1947 de un libro titulado 'Guerra fría'.

300 bombas para 100 ciudades soviéticas

En 1949 EE.UU. elaboró el plan 'Dropshot' con la vista puesta en una eventual guerra nuclear contra URSS y que contemplaba el lanzamiento de 300 bombas atómicas y de 29.000 misiles de gran potencia sobre más de 200 objetivos en 100 ciudades soviéticas para prevenir la expansión de la URSS y la unión de nuevas repúblicas. El comienzo de la guerra fue fijado para el 1 de enero de 1957, pero, según los historiadores, el plan no fue aprobado por el Estado Mayor Conjunto o la Junta de Jefes del Estado Mayor. Hasta 1951 fue usado a menudo como fuente de información sobre lo que haría falta para hacer frente a la URSS y cuánto costaría.

Bomba atómica en la Luna

El plan secreto Proyecto A119 o 'Estudio sobre los vuelos científicos a la Luna' fue elaborado en 1958 por la Fuerza Aérea de EE.UU. y consistía en detonar una bomba nuclear sobre la superficie de la Luna. Se presume que el plan tenía como objetivo demostrar la superioridad de EE.UU. en relación a la URSS y al resto del mundo durante la Guerra Fría. La mayor parte de los documentos relacionados con el plan, que fue revelado solo en el año 2000, ha sido destruida y Washington no ha confirmado oficialmente la existencia de dicho programa. 

La clave secreta del arsenal nuclear de EE.UU. era '00000000'

Durante cerca de 20 años las claves de lanzamiento de misiles intercontinentales se componían de ocho ceros. En 1962 el presidente John Kennedy firmó un decreto para proteger cada arma nuclear del sistema PAL excluyendo la posibilidad de lanzamiento sin la clave correcta ni una autorización. Estos sistemas fueron instalados bajo la supervisión del secretario de Defensa de la época, Robert McNamara. En 1977 fue tomada la decisión de cambiar el clave y poner a cada misil su clave individual.

8 billones de dólares para la guerra ideológica

El historiador de relaciones internacionales Walter LaFeber ha calculado que EE.UU. desembolsó durante la Guerra Fría alrededor de 8 billones de dólares, si se tiene en cuenta el dinero que EE.UU. gastó en la guerra de Corea y de Vietnam, la intervención en Afganistán, Nicaragua, Cuba, Chile, Republica Dominicana y Granada, las operaciones de la CIA y el desarrollo de armamento.

Medallas bipolares

En abril de 2007 el Congreso de EE.UU. aprobó un proyecto de ley para establecer un nuevo galardón por la participación en la Guerra Fría. Se trata de una medalla sin estatus oficial que el Ejército de EE.UU. no reconoce. Cualquier soldado que sirviera en las Fuerzas Armadas de EE.UU. durante este periodo, puede adquirir esta medalla. Solo Louisiana, Texas y Alaska la consideran una medalla oficial.  En EE.UU. existe una asociación de veteranos de la Guerra Fría que exige ser reconocida por las autoridades pero que solo ha logrado que el Departamento de Defensa les entregue certificados que confirman su participación en la Guerra Fría.

La Operación Anádir en Cuba

Así fue como los militares de la URSS llamaron al emplazamiento ultrasecreto de misiles balísticos nucleares, bombarderos de medio alcance y una división de infantería mecanizada en Cuba. La medida se llevó a efecto en octubre de 1962 en respuesta al desplazamiento de los misiles estadounidenses en Turquía, Italia e Inglaterra, y llevó la tensión entre las dos superpotencias a su punto álgido.

martes, 10 de septiembre de 2019

Economía y sociedad en Uruguay durante la segunda guerra mundial

Los gobiernos de Baldomir y Amézaga continuaron con el apoyo a la industria. Los recursos para ello provinieron del agro, cuyas exportaciones crecieron en virtud de la demanda de carnes y lanas producida por el conflicto mundial. El aumento de las exportaciones arrojó un saldo favorable en la balanza comercial y se tradujo en un importante incremento de las reservas de oro en el Banco República. El BROU siguió monopolizando la compra-venta de divisas mediante un complejo sistema de cambios múltiples, que establecía distintos precios según listas de productos preferenciales. La política de subsidios y exenciones fiscales a la industria provocó un importante crecimiento del producto manufacturero. También aumentaron algunos rubros de la producción agrícola, como el lino y el girasol.

El crecimiento del sector secundario implicó el de la clase obrera. Durante el período de la política de sustitución de importaciones, entre 1936 y 1959, el número de obreros creció un 210%, mientras la población lo hizo un 30%. La concentración industrial favoreció la organización sindical. Se fundaron y consolidaron muchos gremios, incluso de "cuello blanco" como el de los bancarios en 1942. Ese mismo año se fundó la UGT —Unión General de Trabajadores—, que congregó a más de 65 gremios, aunque muchos se mantuvieron apartados ya que dicha central sindical era de tendencia comunista. En esa época hubo grandes huelgas, como la del Frigonal en 1943, a la que se plegaron todos los sindicatos de la carne.

Aun dividido, el movimiento sindical obtuvo importantes beneficios, como la instauración de los Consejos de Salarios y varias medidas de legislación social que apuntaban a aumentar la calidad de vida de los trabajadores y a sostener un mercado interno imprescindible para el desarrollo industrial. En el mismo sentido, el Estado se mantuvo como un importante proveedor de empleos, y así engrosó las filas de las clases medias.

La ley de Consejo de Salarios, promulgada en el año 1943, sentaba a dialogar en una misma mesa a representantes del gobierno, de los trabajadores y de las patronales. Esta medida formaba parte de las que buscaban, entre otros objetivos, mejorar las condiciones de salario y de vida de los trabajadores, a fin de crear el mercado interno que requería la industria por sustitución de importaciones. Otras leyes laborales que se destacaron fueron la de Indemnización por Accidentes de Trabajo, en 1941; la de Asignaciones Familiares, en 1943; la de Indemnización por Despido, en 1944. En 1946, por otra parte, se equipararon los derechos civiles de las mujeres a los de los hombres.